domingo, 27 de febrero de 2011

Las 10 frases prohibidas y 10 recomendadas para una entrevista de trabajo


Por: Lizbeth García Rincón, Gerente de Bolsa de Trabajo en la UNITEC

Es muy común que en nuestra primera entrevista de trabajo nos vemos tentados a pronunciar ciertas frases que no siempre pueden ser bien interpretadas por el reclutador.  Sin embargo, nuestro lenguaje verbal –y también el corporal- habla mucho de la actitud y de la seguridad que mostramos ante el puesto para que estemos postulándonos.

Por este motivo, debemos tener especial cuidado antes de pronunciar las siguientes frases:
  1. Creo que…
  2. Me parece...
  3. No tiene importancia.
  4. No sé si sirvo.
  5. Tengo fallos.
  6. Eso me asusta.
  7. Hay otros/as mejores.
  8. A veces pierdo el control.
  9. No lo merezco.
  10. No sé si me conviene,

Por el contrario, hay 10 frases que te recomiendo utilizar porque proyectan que eres una persona segura de tus conocimientos, experiencia y que tienes confianza en ti mismo.
  1. Estoy segura/o...
  2. Venceré ese obstáculo.
  3. Estoy convencida/o...
  4. Estoy satisfecha.
  5. Lo haré bien.
  6. Lo positivo de mí supera lo negativo.
  7. Estaré a la altura.
  8. Si algo me inquieta, sé dominarme.
  9. Sabré responder.
  10. Se adapta a mis capacidades.

Debes de estar siempre seguro que tu mejor carta de presentación son los conocimientos que obtuviste durante tu preparación como alumno de la UNITEC.

Te recuerdo un dato que lo confirma: según una encuesta realizada por Acertiva con 4,955 ex alumnos de la UNITEC, entre 2006 y 2009, nueve de cada 10 egresados consideraron que el plan de estudios de su carrera respondía a las necesidades del mercado laboral.

domingo, 13 de febrero de 2011

Las 6 preguntas más frecuentes en una entrevista laboral



Por Lizbeth García Rincón, Gerente de Bolsa de Trabajo en la UNITEC

¿Te llamaron para una entrevista de trabajo? ¡Magnífico! Sin embargo, aún no eches las campanas a volar. Y es que una entrevista laboral sólo es parte de un proceso de selección, aunque eso sí una fase muy importante y definitiva.
Todos los días, los reclutadores entrevistan a muchos candidatos y van seleccionando no sólo a los que cubren el perfil, sino también a los que se desempeñan mejor en la entrevista, ese momento de contacto personal donde el postulante tiene la ocasión de convencer al reclutador que él es la persona idónea para el puesto.
A pesar de tan decisiva, una investigación realizada por la revista Universo Laboral revela que únicamente 33 por ciento de los candidatos se preparan antes de acudir a una entrevista.
Pero, ¿cómo prepararse? Anticipándonos a las preguntas de filtrado que nos puede hacer el reclutador. En mi experiencia, son seis las preguntas más frecuentes a las que nos enfrentamos en una entrevista:

1.     ¿Qué nos puede decir acerca de usted?
El entrevistador no está interesado en conocer cuestiones personales. Por lo tanto, da información acerca de tus logros profesionales, formación y objetivos de tu carrera. Si deseas dar información extra curricular menciona aquella que podría hacer más fuerte tu postulación como, por ejemplo, actividades de apoyo social, actividades comunitarias o cualquiera que favorezca a la empresa.

2.     ¿Por qué te gustaría trabajar en esta empresa?
Si tu principal razón es el salario, mejor ni lo menciones. El entrevistador quiere encontrar en ti a una persona interesada en el crecimiento, la cultura y la filosofía de la empresa, y en lo que tú puedes aportarle a la misma. Esta es tu oportunidad para mencionar lo que puedes hacer por la empresa y el flujo de beneficios que podría darse entre ambos.

3.     ¿Cuáles son tus mayores virtudes y tus defectos?
Respecto a tus virtudes, elige las que tengan alguna repercusión en lo profesional, por ejemplo: responsabilidad, tenacidad, afán de superación, etcétera. En cuanto a los defectos, trata de ser objetivo, comenta algún defecto real y, acto seguido, cuenta qué estás haciendo para mejorarlo. 


4.     ¿Cuáles son tus planes de futuro?
A las empresas les gusta saber que sus empleados tienen claras sus metas y que se guían por un plan de carrera. No obstante, intenta no ser demasiado concreto y habla de tus aspiraciones en sentido genérico. Por ejemplo, explica que esperas tener un trabajo que sea un reto continuo y permita desarrollarte profesional y personalmente. En este tipo de preguntas es acertado apuntar tu inquietud por aprender, por el reciclaje profesional, y por aspectos que esperas que la empresa sepa valorar e incentivar. 


5.     ¿Dónde te ves dentro de cinco años?
El reclutador desea conocer tus ambiciones y objetivos de carrera. Da una respuesta que refleje cuál será tu próximo objetivo educacional o los movimientos clave que harás para mejorar tu carrera y, por supuesto, para mejorar también la empresa. Recuerda que no siempre se trata de nosotros, sino de lo que puedes hacer por la empresa.  Las empresas no desean invertir en personas que no ayudarán en la organización por lo menos por tres años.

6.     ¿Por qué crees que deberíamos contratarte?
Con esta pregunta, el entrevistador sabe hasta dónde estás dispuesto a luchar por el trabajo. El empresario quiere a alguien entusiasmado por conseguir trabajar para él, dispuesto a dar lo mejor en su beneficio. Nuevamente, trata de informarte lo más que puedas sobre la empresa para demostrar tu interés en el puesto ofrecido. 

Al efectuar estas preguntas, el reclutador puede verificar los perfiles de los candidatos y formar una clasificación de la candidatura de cada uno para la posición vacante. Por ello es muy importante que las revises, las estudies y pienses cómo responderías a cada una de ellas, mostrando siempre una actitud segura y positiva ante el entrevistador.

No está por demás insistir que del resultado de la entrevista laboral depende, en gran medida, la contratación. Mientras mejor estés preparado para ella, más probabilidades tendrás de conseguir la plaza que quieres. En la bolsa de trabajo de la UNITEC, te asesoramos para que vayas bien preparado a tu entrevista de trabajo.


Visítanos en cualquiera de los campus.

domingo, 6 de febrero de 2011

Las 7 C's en la búsqueda de empleo

Por Lizbeth García, Gerente de Bolsa de Trabajo en la UNITEC

Cuando tuve que enfrentarme por vez primera  a buscar empleo, no sabía por dónde empezar. Ignoraba cómo hacer mi currículum vítae,  si tenía que ir a la bolsa de trabajo de mi universidad o registrarme a otros diferentes sistemas de bolsa de trabajo, si debía preguntarles a mis amigos qué habían hecho al respecto y seguir sus consejos… En fin,  empecé por hacer mi CV, busqué  unas vacantes, me registré en algunas bolsas de trabajo y, después de algunas semanas, me hablaron para una entrevista. ¡Qué emoción, iría a mi primera entrevista! Pero nunca me imaginé que así sería.  
Me presenté el día que me citaron, pasé a la entrevista y no habían transcurrido más de quince minutos cuando me dijeron: “Gracias por venir, nosotros te hablamos”. En ese momento, especulando que todo lo había hecho bien, pensé: “Igual y así es siempre”. Sin embargo, pasaron los días y nunca me llamaron.
Exactamente lo mismo ocurrió durante un par más de entrevistas. “¿En algo estoy mal? ¿Para esto me preparé?”, me pregunté preocupada. Fue entonces cuando decidí ir a mi universidad, aunque debo confesar que me daba cierta pena contarles a mis compañeros lo que me había sucedido, porque tal vez era la única persona que había pasado por algo así.  
Para mi buena suerte, me encontré con la sorpresa de que en la Bolsa de Trabajo de la UNITEC me podían asesorar tanto en la elaboración de mi currículum como en lo que tenía que considerar para acudir a una entrevista. Así entendí que no es que estuviera mal preparada; lo que me faltaba era implementar algunas acciones en mi búsqueda.
A estas acciones yo las llamo “Las 7 C’s para buscar empleo”. Espero que te sean de utilidad tanto como fueron para mí.
  1. Cuida tanto la información que incluyes en tu currículum como  la forma de presentarla. Es importante poner tu experiencia, pero también la ortografía, el tipo de  letra,  la fotografía. Considera que es lo primero que va a ver el reclutador;  es tu carta de presentación.
  2. Cambia aquellos datos que no te gusten, pero recuerda que no debes inventar información o cualidades que no te corresponden. Debes ser auténtico ante todo, pues puedes perjudicar  tu imagen si mientes.
  3. Carga tu información profesional en la bolsa de trabajo de tu universidad y en los diferentes medios electrónicos serios para ampliar tus posibilidades y que más reclutadores vean tus datos. En cuanto te hayas postulado para alguna vacante, llama al reclutador para asegurar que le llegó tu información y ver si puedes buscar la cita.
  4. Comunícate  en forma clara y correcta durante  la entrevista. Escucha muy bien la pregunta y después, de modo claro y concreto,  responde con un tono de voz amable y un lenguaje formal a la pregunta. Recuerda que el reclutador no sólo está evaluando tu trayectoria y conocimientos, sino también la habilidad que tienes para expresarte.
  5. Convence durante la entrevista. Si bien el currículum es tu carta de presentación, en la entrevista debes mostrar seguridad sobre los conocimientos y habilidades mencionadas en tu documento. Además, cuida tu imagen personal y muéstrale al reclutador que hizo bien en llamarte.  
  6. Cierra en forma amable la entrevista. Siempre agradece al reclutador por darte su tiempo para esta entrevista y pregúntale cuándo puedes llamarle para darle seguimiento a la vacante. Recuerda darle seguimiento, porque habla de tu interés por el puesto.  
  7. Crea una carpeta en donde vayas dando seguimiento a las vacantes que te postulaste,  cuándo mandaste tu CV, cuándo fuiste a entrevista y cuándo llamaste para darle seguimiento. Un error muy común en la búsqueda de empleo es que, después de enviar tu currículum a varias vacantes, no te acuerdes de dónde te están hablando o si ya fuiste a una entrevista.